El presidente del Consejo Municipal decidió reducir los gastos del arario municipal, y suspender las obras de embellecimiento de la plaza,a (estaban previstos alambrado y parquismo) pues amenazados con el cólera Morbos, era necesario ahorrar dinero para hacer frente a cualquier eventualidad.
A pesar del cuidado un pasajero de la diligencia Goya – Mercedes, burló la cuarentena a la cual se impuso multas a los infractores, además de obligarlos a cumplir con las medidas, el propietario de la diligencia en infracción pagaría también la multa correspondiente. El Consejo pidió informes a Goya, sobre la epidemia, mediante el envió de un chasque días después se recibe la noticia que la enfermedad había declinado notablemente, el Consejo Municipal decide levantar la vigilancia impuesta en los costos del Río Corrientes; se decidió entonces comunicar al vecindario, mediante avisos en las esquinas. Esta experiencia se ha vivido cuando mercedes, hace ya 136 años, afrontó con total responsabilidad y capacidad, adoptando las medidas necesarias para evitar la epidemia del cólera. Por el Consejo Municipal presidido por Don Manuel Isidoro Trim.
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