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2007-03-06 Marco Del Proyecto De Ley Para Regularizar Inmuebles Rurales |
La doctora Josefina Pérez Ruiz, asesora del Ministerio de Producción, Trabajo y Turismo, brindó recientemente en Goya un pormenorizado informe sobre el Plan de Regularización de Dominio de Inmuebles Rurales para Pequeños Productores de Corrientes, programado para todo el ámbito de la provincia.
En su descripción del marco del proyecto de ley, dijo que para el mismo se analizaron aspectos legales para registrar y regularizar los inmuebles, tomándose en cuenta toda la normativa del código civil y lo referido a los procedimientos administrativos y judiciales establecidos en la normativa vigente.
Puso de relieve que de las casi 7 millones de hectáreas dedicadas a explotación productiva en Corrientes, existe una superficie de 144.165 bajo explotación agropecuaria con figura jurídica de mayor precariedad. Estos son los contratos de cosechas por uno o dos años; los pastajes de acuerdo con la ley de arrendamientos agrícolas; los permisos para ocupar las tierras; también están la ocupación sin permiso de predios abandonados o sin dueños conocidos; y otras explotaciones que no categorizan porque no encuadran en ninguna de estas figuras.
De las explotaciones agropecuarias hay 1.564 con permisos, que ocupan una superficie de 86.694 en predios delimitados, lo que representa el 3% del total de explotaciones. Pérez Ruiz aclaró que los datos se obtienen del Censo Nacional Agropecuario y de un procesamiento que hace el PROINDER, específicamente con los pequeños productores, pero no están relevados con los de Catastro, Registro de la Propiedad e Inmuebles, “que sería un segundo filtro de los datos”, advirtió.
Regularización de la tierra
Explicó la nombrada que el hecho de no tener el título de propiedad de la tierra, impide la realización de mejoras e inversiones por la restricción al crédito y también incide en lo que hace a la relación familiar o social, si se tiene que defender la propiedad.
La idea es dictar una norma de regularización dominial para las áreas rurales de la provincia, que involucren a los pequeños productores contemplando facilidades para acceder a la misma. Como ser la eximición de impuestos y de tasas que graven los procedimientos administrativos o judiciales para la regularización y aranceles básicos para remunerar la labor profesional. “Nos estamos refiriendo a las mensuras, a procesos judiciales de prescripción y a la escrituración. Es de uso o de práctica firmar convenios especiales cuando existen planes de interés social”, precisó.
Una mejora en la situación dominial y en los datos registrales dan – en general- mayor seguridad jurídica y certidumbre en todo lo que se refiere a la transacción de inmuebles. Una mejora a los pequeños productores por la absorción de mano de obra y el aporte de productos, mejora también la situación económica y la de la población en general. Por eso se considera que son beneficiarios indirectos.
Los objetivos son regularizar la situación dominial del pequeño productor, mejorar la situación social, patrimonial y familiar, contribuir a la mejora del sistema público. También apunta a vincular los datos para actualizarlos y tener así una base más clara, tanto de los inmuebles como de sus titulares. “Por lo tanto, es un proyecto que dinamizaría todo lo que fuere procedimientos administrativos y obtención de datos. Ese plan apunta a un proyecto de padrón único que existe en el Ministerio de Hacienda”, puntualizó.
En otro momento aclaró que no todos los inmuebles ameritan un largo proceso administrativo para su regularización y poder obtener el título de propiedad de los mismos.
La propuesta es elevar un proyecto de ley que contempla eximición de tributos para la regularización, que va a establecer el plazo del plan, las condiciones y la situación, según los predios a regularizar, sea de un productor individual o de un grupo familiar o de tipo de actividad comunitaria.
Importancia del pequeño productor
Destacó la relevancia del pequeño productor, tanto en el volumen de la producción agrícola como en la ocupación de mano de obra. Se estima que en todo el país absorben entre 52 y 56% de mano de obra en forma directa, cifra importante para evitar la emigración de la zona rural, “es decir que sirve de arraigo de la población”.
Corrientes se encuentra dentro de las cinco primeras provincias que tienen mayor cantidad de pequeños productores y que apuestan a sus productos. Al año 2002 tenemos censadas 15.244 explotaciones agropecuarias, entre pequeñas, medianas y grandes explotaciones. De ese total, que ocupa más de seis millones de hectáreas en explotación productiva, a los pequeños productores corresponden la cantidad de 10.929 explotaciones, lo que da la pauta de la relevancia de dicho sector”.
La expositora confió que ello amerita que se ocupen integralmente del pequeño productor y que se le den las condiciones para que pueda progresar, atento al aporte sustancial que hacen a la economía de la provincia.
Condiciona el esquema productivo
Para describir la problemática hizo hincapié en que la tenencia de la tierra condiciona el esquema productivo, de acuerdo con el menor o mayor margen de certidumbre jurídica que puede darse en la explotación productiva, lo que en cierta medida también condiciona la explotación de los recursos naturales, por la mayor o menor posibilidad de acceder al crédito y a la incorporación de tecnología.
En otro momento la funcionaria de la cartera de Producción confió que el Censo Nacional Agropecuario considera explotación a una superficie de 500 metros cuadrados, en la que pueda vivir una familia rural, que se encarga de la mano de obra. La explotación media de un pequeño productor en la provincia de Corrientes oscila entre 25 y 200 hectáreas. Hay tres tipos que se categorizan en base a la tenencia de tractor, la capacidad ganadera y a la superficie de la explotación; y por otra parte están los más capitalizados que pueden vivir de su explotación y progresar económicamente. Un segundo grupo que vive de la explotación pero no pueden evolucionar; y un tercer grupo de menores recursos que no pueden vivir de sus explotaciones, por lo que se dedican también a otras actividades laborales fuera de las mismas
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